AYER, HOY Y MANANA

Eres un veneno maldito, dulce y adictivo,
Maldito porque mi juicio por ti un día perdí,
Dulce porque sabes a ese fruto prohibido
Y adictivo porque siempre quiero más de ti.

Hace mucho tiempo que tú y yo no hablamos,
Y a pesar de tanto y todo yo no te olvido,
No es que no pueda borrar lo que pasamos,
Simplemente en realidad yo no he querido.

Me encantaría poder hablarte de nuevo,
Pero prefiero mejor verte desde lejos,
No quiero jugar el mismo malévolo juego,
Ese que tu siempre ganas y yo siempre pierdo.

Siempre trato de escrudiñar en tu mirada,
Tal vez así un día quien eres descubriré,
Trato y trato, pero nunca descubro nada,
Más no importa, aun así, mirándote seguiré.

Sólo te pido que no me dejes de mirar,
Mírame con odio, amor o descuidada,
Pero no me quieras de tu mirada privar,
Seria como a un pez quitarle su agua.

Todo lo que un día yo a ti te escribí
Hasta el sol de hoy no ha cambiado en nada,
Espero tus besos y sigo pensando en ti,
Lo hice ayer, lo hago hoy, y lo haré mañana.